¿Por qué utilizar semillas de marihuana feminizadas?

Dentro de la actividad del cultivo de marihuana, son varios los términos que existen que, en el caso de no estar familiarizados con la actividad, pueden suponer un auténtico desafío llegar a entender la amplitud del concepto. De entre todos ellos, son los diversos tipos de semillas uno de los elementos que cobra una mayor relevancia. Sin embargo, conocer cada uno de ellos no es sencillo, dado el amplio abanico de posibilidades que existen.

Uno de los tipos de semillas más conocidos con las semillas de marihuana feminizada. Si estás pensando en utilizar semillas de Marihuana feminizadas, debes conocer las diferentes ventajas y los motivos por los que su popularidad ha experimentado el crecimiento con el que cuenta este tipo de productos. En este artículo te explicamos todo lo que necesitas conocer.

¿Qué son las semillas feminizadas?

Las semillas feminizadas surgen para dar respuesta a uno de los problemas más habituales que existía en esta industria. Cuando se cultivaba cannabis a partir de semillas naturales, siempre existía un 50% de posibilidades de que cada planta que floreciese fuera masculina. Esta podría suponer un importante contratiempo, puesto que únicamente las plantas femeninas con las que desarrollan cogollos que cuenten con THC y CBD.

Este es el motivo por el que las personas que ya cuentan con una gran experiencia a sus espaldas en torno a este tipo de productos, siempre tratan de identificar cuánto antes el género de cada una de las plantas que plantaban para eliminar los machos en el menor tiempo posible. Evitando cualquier posible contratiempo en su producción y crecimiento.

En la década de los 90, la creación de las semillas de cannabis feminizadas supuso una auténtica revolución. Este tipo de semillas reciben una modificación genética que provoca que el 99% de las semillas que se plantan florezcan siendo hembras. Por lo tanto, siempre tenemos la seguridad de que nuestras plantas van a producir los cogollos que son necesarios para su posterior consumo.

¿Cuáles son las ventajas de este tipo de semillas?

• Una mayor eficiencia dentro de cada espacio de cultivo: Cada espacio con el que contamos para poder producir nuestras plantas se aprovecha al máximo, ya que no existe la posibilidad de que exista el crecimiento de un macho. Además, este crecimiento es mucho más uniforme que a través de cualquier otra solución.
• Como los machos no existen, no tenemos la obligación de tener que eliminar a los machos. Por lo tanto, siempre tenemos la seguridad de que cada una de las plantas que llevemos a cabo su plantación sea susceptible de poder crecer de acuerdo a nuestros gustos.
• Popularizando el cultivo: Ahora, llevar a cabo todas las acciones relacionadas con el cultivo resulta mucho más sencillo. Y, por lo tanto, se populariza y se democratiza el mismo. De este modo, surge la posibilidad de poder hacer uso de las propiedades medicinales con las que cuenta el cannabis con una mayor simplicidad.

No es casualidad que las semillas feminizadas hayan experimentado un crecimiento sin precedentes durante los últimos años. Gracias a la amplia variedad de beneficios, así como a la sencillez de su plantación, encontramos todos los ingredientes que son necesarios para exprimir al máximo todas sus ventajas.